Dolor e irritación por dentición del bebé: Consejos para sus clientes
Este artículo contiene alcances sobre la dentición y algunos consejos que el farmacéutico puede transmitir a los clientes cuyos bebés están en período de dentición.
El proceso de la dentición generalmente comienza cuando el bebé tiene de 6 a 8 meses de edad siendo una etapa del crecimiento dolorosa e irritante, tanto para los bebés que la padecen, como para los familiares que los ven sufrir.
Todos los 20 dientes “de leche” o temporales están en su lugar cuando el niño cumple 30 meses de edad. Algunos niños, no tendrán ningún diente hasta después de los 8 meses, pero esto generalmente es normal.
Pregunte a su cliente cuáles dientes de su bebé han salido, normalmente la aparición es la siguiente:
Los dos dientes incisivos frontales inferiores a menudo salen primero.
Los dos incisivos superiores frontales generalmente son los siguientes en salir.
Luego aparecen los otros incisivos, los molares superiores e inferiores, los caninos y finalmente los molares laterales inferiores y superiores.
Pregunte a su cliente si el bebé tiene los siguientes signos:
Actuar irritable o melindroso.
Morder o masticar objetos duros.
Babeo, lo cual a menudo puede empezar antes de que comience la dentición.
Inflamación y sensibilidad de las encías.
Rechazo a la comida.
Problemas para dormir.
Sugiera a su cliente:
La dentición no debería causar fiebre ni diarrea. Si su cliente describe que el bebé presenta fiebre o diarrea, recomiende que consulten con su pediatra.
Consejos al cliente para aliviar las molestia de la dentición del bebé:
Limpiar la cara del bebé con un paño para quitar las babas y prevenir un salpullido.
Darle al bebé un objeto frío para masticar, como un aro firme de goma para la dentición, que se pueda mantener en el refrigerador nunca en el congelador.
Asegurarse que el mordedor sea lo bastante grande como para que no se lo pueda tragar ni atragantar, y que no se pueda romper en fragmentos pequeños.
No hervir ni esterilizar los mordedores ya que los cambios extremos en la temperatura podrían dañar el material y provocar pérdidas de sustancias químicas.
Evite cualquier objeto plástico para morder llenos de líquido, ya que pudiera romperse.
Frote suavemente las encías con un dedo limpio envuelto en un trozo de tela húmedo y frío o (hasta que los dientes estén justo cerca de la superficie). Puede colocar el pedazo de tela limpio y húmedo en el refrigerador.
Si el bebé come alimentos sólidos, que estos sean comidas blandas y frías como compota de manzanas o yogur.
Puede utilizarse un biberón, si parece que esto ayuda, pero debe llenarse únicamente con agua.
El paracetamol u otros similares pueden ayudar cuando el bebé está muy irritable o molesto. Sugiera a su cliente que consulte con su pediatra la dosis ya que esta se establece por peso y edad del bebé.
Si el bebé tiene 2 años de edad o más, los geles y las preparaciones que se frotan en las encías pueden ayudar con el dolor por un período corto. Se debe tener cuidado de no usar demasiado. No se debe utilizar estos medicamentos en menores de 2 años de edad. Comprobar que dichos medicamentos están autorizados por la autoridad sanitaria.
Recomendar a su cliente que lea y siga las instrucciones en los insertos en las cajas de los medicamentos y si no está seguro de cómo usarlos, debe llamar al pediatra del bebé.
Sugerir también a su cliente lo que no se debe hacer:
No amarrar ningún mordedor u otro objeto para la dentición alrededor del cuello u otra parte del cuerpo del bebé. Podría engancharse en algún objeto y estrangular al bebé.
No usar collares de dentición fabricados con ámbar. Facilitan la estrangulación, así como el atragantamiento y la asfixia por aspiración, al desprenderse las cuentas de ámbar.
No colocar nada congelado contra las encías del bebé.
No cortar nunca las encías para ayudar a que un diente salga, esto puede conducir a que se presente infección.
No utilizar polvos para la dentición.
No darle al bebé ácido acetilsalicílico ni ponerlo contra las encías o los dientes.
No frotar alcohol sobre las encías del bebé.
No utilizar remedios homeopáticos. Pueden contener ingredientes que no son seguros para los bebés.